Arqueólogos del centro de China han hecho un descubrimiento notable al desenterrar una colección de tumbas antiguas que datan de hace tres milenios. Las tumbas, ubicadas en la ciudad de Zaoyang, provincia de Hubei, pertenecen al Período de Primavera y Otoño (770 a. C.-476 a. C.), una época significativa en la historia china. La excavación ha revelado al menos 30 tumbas de diversos tamaños, que se cree que pertenecieron a nobles de alto rango de la época.
Entre los hallazgos más intrigantes se encuentra un foso de carro recién descubierto, que mide 33 metros de largo y cuatro metros de ancho. A diferencia de descubrimientos anteriores a lo largo del río Yangtze, este pozo contiene carros y caballos densamente enterrados. Según el profesor Liu Xu de la Escuela de Arqueología y Museología de la Universidad de Pekín, muchos de los carros fueron encontrados sin las ruedas y cuidadosamente colocados uno al lado del otro.
En tan solo tres meses, los investigadores han desenterrado un total de 28 carros y 49 pares de esqueletos de caballos muy cerca del foso del carro. Los esqueletos de los caballos fueron colocados de una manera que sugiere que fueron enterrados después de haber sido asesinados, sin ningún signo de lucha. Huang Wenxin, investigador del instituto arqueológico provincial, señaló que dos caballos estaban colocados espalda con espalda, lo que indica que se utilizaban para tirar de un solo carro. Esto proporciona información valiosa sobre la estructura jerárquica de la época, donde el número de carros era a menudo un indicador de la fuerza y el poder de un país.
El período de primavera y otoño en la historia de China fue una época de importantes cambios sociales. Marcó el fin del feudalismo y el surgimiento de estados poderosos resultantes de la consolidación de principados más pequeños. La urbanización también comenzó a arraigarse durante este período. además, nació una clase de comerciantes adinerados, y se cree que algunos miembros de esta clase podrían haber estado entre los que descansan en las tumbas descubiertas.
El entierro de caballos junto a los carros sigue siendo objeto de especulación. Sin embargo, se sabe que la antigua China practicaba sacrificios humanos y animales para apaciguar a los dioses del tiempo, de cuya benevolencia dependía el pueblo. Esto podría explicar la presencia de esqueletos de caballos cerca de los carros.
El período de primavera y otoño tiene una gran importancia en la historia de China, y este descubrimiento arqueológico proporciona información valiosa sobre las vidas y costumbres de los nobles de alto rango durante esa época. A medida que los investigadores continúen estudiando y analizando los hallazgos, podemos esperar obtener más conocimientos sobre este período intrigante y su conexión con la civilización china moderna.
Es fascinante presenciar cómo las civilizaciones antiguas, incluidas la china y la egipcia, realizaban grandes entierros ceremoniales, que a menudo incluían sacrificios, como forma de honrar a los difuntos y potencialmente asegurar una mejor vida después de la muerte. Estos hallazgos arrojan luz sobre las creencias culturales y religiosas de estas sociedades antiguas y ofrecen una visión del complejo entramado de la historia humana.